domingo, 26 de octubre de 2008

La Sombra Sobre Arkham X

-Alguien esta adentro… movieron el candado- Dijo Marco cuando llegamos al edificio por donde entramos a la Universidad hacia apenas una hora
-Será el señor Foreigner- Dijo Marion –Quizás deberíamos volver mas tarde
-No, es mejor entrar y enfrentar las cosas de una vez. Tengo que encontrar a Dhan, y si quieres volver a ver a tu hermano, esta es la oportunidad- Abrí la puerta y entramos.
Al llegar a los dormitorios el poco valor que me quedaba estuvo por irse, pensé en lo que había visto y en lo que Marion nos había comentado sobre el pueblo y el señor Foreigner y entonces llegó a mi mente una idea: ¿Y si esto es en vano?. Por como estaba todo el asunto, Dhan podía estar muerto en cualquier parte de la ciudad. Sacudí la cabeza pero no el sentimiento, aun así, no podría dejarlo en este lugar tan horrible. Marco se acercó a la puerta del dormitorio y se detuvo
-Alguien podría estar adentro- Nos hizo una señal para que nos quedáramos quietos, desenfundó su arma y empujo suavemente la puerta. Entro por el pasillo y lo perdimos de vista. Nada. Entramos al edificio y fuimos directo al pequeño jardín al final del pasillo
Si el lugar ya se veía bastante macabro, estaba ahora peor. De los hoyos escarbados en el suelo, en cuatro de ellos pareciera que se había sacado algo que llevaba enterrado suficiente tiempo. Marco se acerco y yo fui tras de el, Marion se quedo en la puerta conteniendo la respiración.
-Si eran tumbas- Dije -Y no son muy grandes
Marco no pareció ponerme atención, estaba mas concentrado en algo que estaba en el suelo, seguí su mirada y entonces encontré un rastro de mugre y tierra que salía de esas cuatro tumbas pequeñas, todas acababan siguiendo la misma ruta: hacia los dormitorios.
-El señor Foreigner debió llevarlos al sótano, a la biblioteca oculta de la Universidad- Marion dio media vuelta y comenzó a caminar -Vamos, esto debe estar por acabar-
Justo entramos al edificio, las primeras gotas de lluvia comenzaron a caer
Seguimos el rastro hasta que llegamos a una pequeña bodega, Marco saco su linterna ya que las lámparas del lugar no funcionaban y descubrimos que la bodega era solo estrecha, pero de profundidad era enorme. Marion pidió la linterna y nos guió por el lugar hasta que llegamos a una pared que marcaba el final del camino.
-Bueno, y ¿De aquí que hacemos?- Pregunto Marco
Marion se agacho y por un pequeño agujero que pasaba por madriguera de ratas (quizás lo fuese) metió la mano y comenzó a tantear dentro del hueco hasta que por su cara comprendimos que había encontrado algo. Un momento de esfuerzo y un ruido mecánico comenzó a escucharse y de la pared de enfrente un panel movedizo se botó dejando entre abierto un pasadizo: escaleras que bajaban a la biblioteca oculta.

La biblioteca oculta debía ser incluso mas grande que la que se encontraba en la campus de la Universidad, cosa que en el pasado me hubiese parecido asombrosa por la cantidad de libros y volúmenes ocultos en sus estantes que ahora solo me daban escalofríos. El libro de Eibon, el libro de Iod, aquel extraño tomo con el signo amarillo de Hastur, todos parecían tener vida y estar siguiéndote con ojos fantasmagóricos en cada paso que dabas, esperando el momento en que tropieces y salten hacia ti para devorarte con el conocimiento maldito que han guardado desde siempre. Y entonces recordé, el libro que había encontrado en el cuarto del señor Foreigner.
-El rastro termina aquí, y no se ven pistas de que camino tomo… ¿Todo bien Drew?- Marco me acerco un poco mientras yo buscaba en mi mochila el libro robe de aquel dormitorio
-Aquí esta- Saqué el libro de la mochila pero comencé a sentirme débil y acabe por sentarme en una silla junto a una mesa de estudio. Marco se colocó a mi lado y Marion se acerco para ver que había sacado -Este libro lo encontre en el cuarto del viejo ese, pero no puedo… no lo soporto, estar cerca de el me marea, tocarlo me hace sentir perder las fuerzas- Lo coloqué en la mesa de estudio y me recargue en la silla
Marion tomo el libro y tuvo que sentarse, pero no dejo de hojearlo, Marco llevo una silla a mi lado y ahí se sentó
-Estoy bien, gracias. Deberíamos seguir buscando a donde fue el señor Foreigner con… lo que sea que halla sacado de esos agujeros- Me puse de pie -Marion, buscaremos alguna pista de que camino seguir, no tardaremos
-Si, esta bien- Contesto absorta en su lectura
-Ten cuidado con ese libro, y cualquier cosa que encuentres, escuches o veas, avísanos, vendremos de inmediato- Termino Marco.
Caminamos por todo el perímetro de la biblioteca y comprobamos que la habitación tenía forma pentagonal, 10 estantes de 10 metros de largo por 3.5 metros de altura, había 5 mesas de trabajo repartidas entre los estantes y una escultura en el centro de la construcción. “Las mil mascaras de Nyarlathotep” era el nombre de esa escultura, debía medir dos metros de altura y estaba colocada en un pedestal de medio metro adornado con bordes barrocos llenos de figuras y formas rebuscadas. Al principio parecía ser solo una columna con un relieve curioso, pero viendo de cerca esa pieza de arte, tenia caras pequeñas que cubrían toda la figura, no las conté pero no dudo que fuesen las mil caras que declaraba su nombre. La placa decía algo mas:

El gran Nyarlathotep, señor de Arkham, guarda a tu gente en tu sombría ala

Según tenía entendido Nyarlathotep es una especie de ente reconocida en múltiples culturas pero especialmente en el antiguo Egipto, digamos que incluso se le considera como una divinidad, que sirve de mensajero entre ciertas criaturas-deidades que rigen el universo, y aunque no sabía de cultos que lo veneraran como un dios tampoco me extrañaba que existiese uno. Solo que no me sentía a gusto sabiendo que me encontraba en uno de esos centros del culto
-Drew, quizás no fue una buena idea venir hasta acá- Marco parecía algo cansado y preocupado, pero siempre mirándome directamente a los ojos
-No me gusta esto mas que a ti, pero tengo que encontrar a Dhan, aun si el esta…- Baje la mirada y me puse a ver nada en particular, las palabras parecían no querer salir.
-Hey, no, esta bien, vamos por buen camino, veras que lo encontraremos- Marco se puso frente a mi pero le dí la espalda y quede de frente al monumento a Nyarlathotep. Sentí las manos de Marco apoyarse en mis hombros a modo de apoyo supongo, pero entonces me agache, en mi desvío de mirada encontré algo que me llamó la atención, el piso al lado de la escultura estaba gastado y tallado, como si alguien hubiese empujado algo muy pesado
-Mira, esto parece que puede moverse- dije y Marco se colocó a mi lado para tener una mejor vista
-Si, vamos a moverlo
El grito de Marion nos tomo por sorpresa, al parecer encontró algo

1 comentario:

Dtortot dijo...

O algo la encontró a ella.

Buen capítulo, me gusto mucho la atmósfera que creaste.

Aunque me dio algo de risa lo del libro me recordó al Señor de los Libros... errr... digo Anillos.